Llevo tiempo detrás de empezar a hacer fotografía de conciertos, y gracias a Octava Polar, que actuaba el jueves pasado en la Sala Matisse de Valencia, por fin he podido quitarme la espinita.
Desde estas líneas quiero agradecer la amabilidad de todo el grupo, que me permitieron trabajar con total libertad durante su concierto, y desearles la mayor de las suertes en el concurso “Sona La Dipu” de este año.
Por lo que lees en páginas especializadas, es un gran reto fotográfico. Te encuentras con el problema de tener nulo control sobre la luz que habrá en cada momento en el escenario, esta es muy cambiante tanto en intensidad como en tonalidades, y, salvo que vayas a macroconciertos, escasa en salas pequeñas vas a encontrarte con mucha escasez de luz.
En esta ocasión tuve que disparar con una sensibilidad ISO superior a 2000, para configurar la cámara a una velocidad de al menos 1/100, y una apertura de f/2.8. A pesar del grano que se puede apreciar en las fotografías, estoy muy satisfecho con el resultado obtenido.
[soundcloud url=»http://api.soundcloud.com/tracks/79039933″ width=»100%» height=»166″ iframe=»true» /]
Os dejo con una pequeña selección de fotos tomadas durante la actuación, y espero poder publicar más fotos de conciertos en breve :)
Están chulas las fotos. El otro día ví unas fotos en una discoteca con flash y exposiciones largas y me parecieron una alternativa chulísima.
Muchas gracias por la aportación Javier.
Había estado leyendo sobre lo que podría molestar el flash a los músicos, y más a distancias cortas, no obstante, lo consultaré con ellos en la próxima ocasión, a ver qué se puede hacer ;)